La limpieza facial profunda es un tratamiento para mejorar la salud y el aspecto de la piel del rostro. Permite eliminar puntos negros, comedones e impurezas que se acumulan día a día y hacen que la piel pierda vitalidad, frescura y luminosidad. Por eso, la higiene facial es una rutina clave e indispensable para mantener una piel saludable, joven y luminosa.

• Eliminar impurezas y células muertas 
• Logramos una piel de aspecto brillante y saludable
• Estimula la absorción de cremas y serums

• Rostro
• Cuello 
• Escote

Se realizan en gabinete y constan de varios pasos: preparación de la piel, exfoliación, extracciones, limpieza, hidratación y protección solar.  Se pueden combinar con otros tratamientos y aparatología como la punta de diamante. 

La higiene facial debe ser parte de nuestra rutina diaria, se sugiere combinarlas con limpiezas profundas en el consultorio de manera mensual.